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La Presidenta de la FEHM participa en el Gran Debate Hotelero

Organizado por Grupo Vía


La Presidenta de la FEHM ha participado hoy en el Gran Debate Hotelero celebrado en el Hotel Santos Nixe Palace durante el cual los ponentes han hablado de expansión internacional y nacional, detección de los destinos más atractivos, elección entre compra, alquiler o gestión, oportunidades de financiación, alternativas a la compraventa de activos, la reputación online o procesos de upselling, cross-selling y atención al cliente. A lo largo de la jornada, han participado también Oscar González de Iberostar, Jos Graven, Director de Expansión de RIU, Jaime Buxó, Director General de Desarrollo de Negocio de Barceló, Sergio Zertuche, Vice President of Sales & Marketing de Palladium, Gabriel Llobera, Vicepresidente Ejecutivo de Garden, Elena de la Torre Díaz, Digital Sales & Marketing Director Spain & Mediterranean Region de Meliá, y Rafael de Jorge, Director de Marketing de Ona Hotels, entre otros representantes de empresas de servicios hoteleros. 

Inmaculada Benito ha iniciado su conferencia haciendo un repaso al momento turístico presente sobre tres rasgos: la resiliencia del sector turístico, la generación de rentas y el posicionamiento. Y es que los datos reflejan que el Turismo ha demostrado tener una mayor capacidad para absorber los efectos negativos derivados de la última fase recesiva; que ha sido y es clave en la generación de empleo, riqueza, dados los efectos multiplicadores que ejerce sobre el conjunto del tejido productivo; y ha sido y está siendo eje prioritario en la generación de ingresos fiscales necesarios para el mantenimiento del Estado de bienestar. 

Inmaculada Benito ha definido el presente de la política turística de España indicando que “efectivamente, estamos en un momento dulce, no sólo en términos de coyuntura sino que además éste presente es sólido para afrontar el futuro porque tenemos una mayor resiliencia, una mayor capacidad de rentas y un mejor posicionamiento que nos da la oportunidad de trabajar mejor el futuro incierto que desde nuestro punto de vista se presenta”.

Al hacer referencia al futuro, la primera reflexión que ha planteado la líder del sector hotelero ha sido vinculada a la necesidad de desarrollar una política turística a medio y largo plazo que en cualquier caso exceda los ciclos políticos para aproximarse en los ciclos económicos.

La nueva política turística debe centrarse en profundizar en la generación de valor y favorecer las interrelaciones con el resto de sectores económicos. “Se trata de una visión holística y transversal de la nueva política turística que no debe estar basada en la cantidad, no tiene que incidir en el volumen sino debe centrarse en generar los réditos no sólo empresariales sino también regionales, mejora del bienestar” y para ello es imprescindible evaluar los riesgos y oportunidades desde una doble perspectiva temporal y cualitativa, siendo ésta última las más importante en tanto en cuanto debe garantizar la aportación del turismo al balance regional y por tanto al bienestar de la sociedad, para ello, ha explicado la Presidenta, sólo hay una alternativa que es impulsar la competitividad global turística.

La Presidenta ha resaltado que no puede desarrollarse una nueva política turística sin tener en cuenta la transformación en la que está inmersa el sector en términos “de mayor diversificación de producto, sofisticación del cliente y diversificación, tanto de orígenes como de competencia que incorporan más complejidad. Además, la nueva política turística debe responder a la transformación económica que se debe acometer durante los próximos años”. 

Esta nueva política planteada por la Presidenta de la FEHM debe garantizar su aportación al crecimiento, empleo, rentabilidad y valor social. “Los cuatro ejes son importantes, de nada nos sirve crecer si no se genera más y mejor empleo, no se obtendrá valor social si no se incrementa la rentabilidad turística empresarial”. El incremento de la rentabilidad vendrá dado a través de la mejora de los flujos de inversión “la consolidación económica necesita de mayor inversión y concretamente mayor inversión turística, inversión que debe estar dirigida a mejorar la productividad. Sólo mejorando la rentabilidad empresarial se puede incrementar la inversión y así conseguir la mejora del valor social del bienestar de la población”.