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La FEHM participa en el Congreso Internacional de Turismo Cultural

Inmaculada Benito y Antoni Sansó de Cala Millor- Sa Coma destacan la importancia de la colaboración público-privada para desarrollar el turismo cultural


La vicepresidenta de la FEHM, Inmaculada Benito, ha participado hoy en el Congreso Internacional de Turismo Cultural organizado por la UIB que se desarrolla desde hoy hasta el sábado en Palma. La intervención de la vicepresidenta se ha enmarcado en la mesa redonda bajo el título "Receptividad e iniciativas del turismo cultural", en la que también han participado el presidente del Fomento del Turismo, Eduardo Gamero y el gerente de la Asociación Hotelera de la Bahía de Cala Millor-Sa Coma, Antoni Sansó.  

La vicepresidenta inició su presentación planteando la oportunidad de la cultura como atractivo turístico desde dos pilares: uno, como una realidad ya existente que se basa tanto en los recursos culturales como en la dinamización y el desarrollo de la política turística de municipios como Palma, Pollensa, Alcudia, etc. donde ya se ha considerado la cultura como un eje estratégico.

Y por otra parte como una oportunidad, porque tenemos un problema de estacionalidad y necesidad de alargamiento de la temporada y tenemos que intentar un posicionamiento en la mente de los consumidores internacionales de Mallorca como un destino cultural, bien sea la cultura como principal atractivo, bien sea cultura como una vivencia más que pueden incorporar a su experiencia principal.

Los recursos patrimoniales públicos, privados y eclesiásticos son múltiples y variados, no obstante, desde el sector empresarial, se está trabajando por intentar añadir valor a esas infraestructuras básicas con las que se venían satisfaciendo las expectativas del cliente de sol y playa tradicional.

Si analizamos en ciclo de vida de la los productos, la cultura, que se encontraría en una fase de crecimiento, tiene un potencial muy elevado. Podría también responder a las necesidades de un nuevo cliente que busca vivenciar sus vacaciones y no le basta con una motivación principal sino que busca mejorar su experiencia global. En ese caso, la cultura, el arte, ya está contribuyendo a mejorar esta experiencia, pero se debería de ampliar su posicionamiento.

El problema, aún contando con los recursos y las propias vivencias del país, está en la manera de desarrollar las políticas turísticas hasta la fecha. Según Inmaculada Benito, se han venido impulsado unas políticas de demanda, sobre todo al inicio del desarrollo turístico, donde primaba el crecimiento y el objetivo era lograr un mayor número de turistas. Cuando se llegó a unos niveles de crecimiento adecuados, se pusieron en marcha las políticas de oferta, que son las que se han dedicado a dar seguridad jurídica tanto a empresas como a clientes y trabajadores, dentro del desarrollo de la actividad, pero lo han hecho de una forma independiente. Desde la FEHM se piensa que un primer paso tiene que ser coordinar el desarrollo de las políticas de demanda y las de oferta. El segundo paso sería impulsar unas políticas integrales de turismo en las que, desde todos los niveles administrativos e institucionales, se desarrollaría una política de vasos comunicantes, de tal manera que las decisiones que se tomaran en cada una de las instituciones fueran válidas para otras y cada una, en función de sus competencias, las fuera desarrollando.

En definitiva, se trata de asumir el gran reto que es optimizar al máximo la cooperación público-privada, la pública-pública, y la pública-privada-pública,  para que funcionen homogéneamente.

Para concluir, la FEHM plantea tres objetivos básicos, el primero de ellos la generación de producto, donde la cooperación público-privada tendría el eje para transformar esos recursos en un atractivo y posteriormente ponerlo en valor para que en las mentes de los consumidores estuviera presente. El segundo de ellos, identificar oportunidades de esos recursos, desde la actividad comercial, a la actividad económica, en el sentido en el que se tendrían que facilitar incentivos o dar una serie de facilidades a las empresas, tanto a las comercializadoras como a las que ponen el producto para que fuera rentable. Y todo ello, debería ir integrado en un plan de acción medible y calendarizado que permitiera evaluarse para hacer las correspondientes correcciones y tomar las correctas decisiones estratégicas.

Por su parte, Antoni Sansó, ha hecho también hincapié en la necesidad de llevar a cabo una colaboración público-privada para la creación de productos culturales que enriquezcan la experiencia del cliente, sobre todo en temporada baja, poniendo en ejemplo de las acciones que desde la Asociación Hotelera de Cala Millor-Sa Coma se están llevando a cabo con los ayuntamientos de la zona.