La presidenta y gerente de la FEHM se reunieron ayer con los redactores de 18 medios de comunicación de Mallorca. Los medios recogen hoy en sus ediciones las informaciones y el balance del año realizado en el transcurso de la comida.
En este sentido, la presidenta de la Federación Empresarial de Hoteleros de Mallorca (FEHM), Marilén Pol, señaló que los establecimientos turísticos de la isla han cerrado el 2010 con un descenso de un 10% en la rentabilidad con respecto al año pasado, debido a un descenso en la ocupación hotelera de un 1%, en comparación con 2009, y a la caída de precios en cerca de un 15%.
Marilén Pol anunció un ligero incremento del gasto en relación con 2009, al señalar que durante el primer semestre de 2010 se produjo un descenso de un 16%, que sólo se recuperó en un 6,6% durante el segundo semestre gracias a los meses de julio, agosto y septiembre.
También, Pol apuntó que los ingresos de los establecimientos hoteleros han caído puesto que también se ha producido un descenso en las pernoctaciones de casi un 17%. En concreto, fue en los meses de entre enero y mayo cuando se produjo una mayor caída (13,4%).
Según el análisis realizado por la FEHM, la temporada 2010 ha sido para los hoteleros "muy irregular" y ha estado marcada por "buenas ocupaciones" en los meses de temporada alta, motivadas por una "ligera" recuperación del mercado alemán, por la alta ocupación en los destinos competidores -especialmente en Turquía- y por una rebaja "importante" de los precios para traer más clientes a Mallorca.
Para FEHM, por lo tanto, se ha producido una "ligera" recuperación durante los meses de julio, agosto y septiembre en cuanto a las pernoctaciones y, también, de los ingresos. Sin embargo, el descenso en los precios de las habitaciones ha provocado un "estancamiento" en la rentabilidad de los establecimientos turísticos.
La FEHM criticó que los hoteles de la isla siguen "arrastrando" el problema de la estacionalidad del turismo balear, generando una preocupación "importante" entre los empresarios puesto que las temporadas turísticas son cada vez más cortas, los precios han disminuido repercutiendo en la rentabilidad, y el estancamiento de los inversiones empresariales.
Al respecto de las previsiones para 2011, la presidenta de la federación destacó que la próxima temporada "no será muy buena" y que de producirse una recuperación, ésta será "ligera". En cualquier caso, enfatizó que la ocupación en los meses de temporada alta será "parecida o algo superior" a 2010. Eso sí, lo que va a diferenciar la próxima temporada de la actual va a ser el inicio y el final del año, y, con ello, las ventas de última hora.
En cuanto a la ocupación para el próximo año, Pol anticipó que, por el momento, el mercado alemán será "algo mejor", mientras que el mercado británico sigue siendo "una incógnita". En materia de precios de las habitaciones, éstos se van a mantener como esta temporada, puesto que, según la máxima responsable de los hoteleros, "ya se han firmado".
Para la gerente de la FEHM, Inmaculada Benito, estas cifras y valoraciones se pueden resumir en que los establecimientos turísticos de Baleares siguen teniendo un problema estructural de competitividad respecto a los otros mercados, y es que el modelo de las islas está basado en el volumen de ocupación "al precio que sea", que es un modelo caduco que no tiene futuro, mientras que los costes para las empresas hoteleras aumentan año a año provocando preocupantes descensos de rentabilidad que merman las capacidades de inversión. Esta circunstancia que retrasa el proceso de modernización y reconversión se agrava además a causa del encorsetamiento administrativo normativo.
EL DECRETO NADAL MARCA ESTA LEGISLATURA
La presidenta de la Federación resaltó que a pesar de la llegada "tardía" del Decreto Nadal que permite la modernización de los establecimientos hoteleros, éste ha sido un "paso adelante y fundamental" para el futuro de los hoteles de la isla.
También remarcó que la creación de la Oficina para la Reconversión, a modo de ventanilla única, ha facilitado que los propietarios de los hoteles puedan solicitar cambios de categoría.
Asimismo, el establecimiento de un nuevo Orden de Clasificación ha permitido unificar la categoría de los hoteles del archipiélago, en cuanto a su calidad con el resto de Comunidades Autónomas.
Como puntos negativos, Pol criticó el "estancamiento" del proyecto de reconversión de la Playa de Palma y la "incertidumbre" sobre el futuro del Palacio de Congresos. Por último, se refirió a la necesidad de simplificar la duplicidad de las competencias del Govern y el Consell de Mallorca en materia de promoción de la isla, al señalar que éstas se solapan y, en cualquier caso, lo que piden es que se rentabilicen los recursos para que repercutan lo máximo posible.
La máxima responsable de la entidad anunció que el próximo mes de enero la FEHM presentará un documento con el fin de abrir un debate entre las diferentes fuerzas políticas de cara a las elecciones autonómicas para pedir que el próximo Ejecutivo balear, insular y local se marque como "máximo prioridad" el turismo.
En este sentido, la FEHM propondrá un pacto con una serie de aspectos claves que deberán ser respetados por todos los partidos políticos, entre los cuales destacan la necesidad de reducir el número de plazas hoteleras y que se establezca un plan de incentivación para aquella oferta que permanezca, para que ésta se modernice y pueda competir con los diferentes mercados. También, incluye la importancia de estimular la inversión privada.
Otro de estos aspectos será la creación de un plan "ambicioso" de reconversión que asegure el mantenimiento de la industria turística en Baleares, basada en la oferta hotelera reglada.
La próxima legislatura deberá estar marcada por una mejor gestión de los recursos públicos en materia turística que, según Pol, ha suscitado discrepancias entre las clases empresariales. En este sentido, se ha referido a la necesidad de simplificar la duplicidad de competencias en Administraciones y racionalizar el gasto permitiendo, así, que se creen proyectos conjuntos entre empresa privada y pública.
(Foto de Guillem Bosch publicada en Diario de Mallorca)
